26 July 2024
 

 

MEMORIA DE SANTA MARÍA MADRE DE LA IGLESIA

Mayo  20 de 2024

Entrada: Concluido el tiempo pascual, celebramos hoy la memoria de la bienaventurada Virgen María, Madre de la Iglesia. Por designio divino, el nacimiento de la Iglesia y los comienzos de su misión en el mundo están confiados al cuidado materno la Virgen María: en la cruz, Cristo nos dio a su Madre por madre nuestra en el discípulo amado y ella esperó junto con los apóstoles la venida del Espíritu Santo en Pentecostés. Desde aquellos primeros pasos de la Iglesia hasta el día de hoy, este cuidado materno de la Virgen María se extiende a todos los discípulos del Hijo. Es una prueba más del insondable misterio del amor de Dios, que quiso que tuviéramos por Madre a la misma Madre del Salvador. Celebremos con fe.

 Lecturas: La Palabra de Dios resalta hoy la figura de san Juan, el apóstol amado, escogido por el Señor para acoger a la Santísima Virgen María y en él toda la Iglesia ha acogido a la Virgen como Madre y Maestra. Escuchemos con atención.

 

Ofrendas: Como María, Madre de la Iglesia, junto al pan y el vino ofrezcamos nuestras vidas al Señor.

 

Comunión: Acerquémonos a recibir el pan que del Cielo baja, para alimentarnos en esta travesía hacia la Patria Celestial.

 

ORACIÓN UNIVERSAL

 

Queridos hermanos: Unidos a María, figura e imagen de la Iglesia que un día será glorificada, presentemos nuestras oraciones a Dios Padre a favor de todos los hombres. Unámonos diciendo: Por intercesión de la Virgen María, escúchanos, Señor.

 1.    Por la Iglesia, pueblo de los creyentes: para que en todos sus miembros sea llamada dichosa por haber creído que la Palabra de Dios se cumplirá. Roguemos al Señor.

2.    Por todos los que lo han dejado todo para seguir a Cristo: para que sepan, como María, escoger la mejor parte y entregarse totalmente a lo único necesario. Roguemos al Señor.

3.    Por lo que han perdido seres queridos: para que encuentren en María el afecto y la protección de una madre que recibió esta misión de su Hijo en la cruz. Roguemos al Señor.

4.    Por los matrimonios y las familias cristianas: para que sean escuela de amor y aprecio a la vida frente a quienes, como Herodes, quieren la muerte de los inocentes que todavía no han nacido. Roguemos al Señor.

5.    Por todos nosotros: para que sepamos conservar todo lo referente a Cristo y al reino de Dios, meditándolo en nuestro corazón. Roguemos al Señor.

 Padre de bondad, que estos deseos que te presentamos encuentren eco en tu amor generoso, y que nos ayude la intercesión poderosa de la Madre de tu Hijo, nuestro Señor Jesucristo. Que vive y reina por los siglos de los siglos.

 

SOLEMNIDAD DE LA SANTÍSIMA TRINIDAD

Mayo 26 de 2024

 Entrada: Nos reunimos este domingo como Iglesia, pueblo santo escogido por Dios, para celebrar las obras que el Señor realiza en  cada uno de nosotros a lo largo de la historia, en la cual se nos revela como Padre, Hijo y Espíritu Santo, manifestando todo su amor hacia nosotros. Alegrémonos todos en el amor del Padre, en la gracia del Hijo y en la comunión del Espíritu Santo. Celebremos con fe y esperanza.

 Lecturas: Jesús envía  a sus discípulos a evangelizar y hacer discípulos en todas las naciones de la tierra, en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Como ellos, ¿estamos dispuestos a asumir esta misión, que el Señor nos encomienda? 

 Ofrendas: Ofrezcamos a Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo, todo cuanto somos, para que a semejanza de la comunidad trinitaria crezcamos en la unidad y la caridad. 

 Comunión: Entremos en unión íntima con Cristo, comulguemos con su Cuerpo y Sangre, signos de unidad y de fraternidad. 

 

ORACIÓN UNIVERSAL

 Queridos hermanos: la palabra de Jesús, nos revela la abundancia y solicitud del amor de Dios por nosotros, con plena confianza en este mensaje dirijamos nuestras súplicas al Padre diciendo: Dios Uno y Trino, escúchanos.

  1.  Para que la Iglesia, nuevo pueblo de Dios, con sus ministros ordenados, religiosos y fieles laicos, haga visible en el mundo el amor de la comunidad Trinitaria, Padre, Hijo y Espíritu Santo, manifestado en el amor a los hermanos. Oremos.
  2. Para que nuestra nación y los países del mundo, encuentren caminos de paz y justicia, así se pueda vencer toda tentación de odio y violencia. Oremos.
  3. Para que aquellos hermanos nuestros que sufren por causa de la enfermedad, la pobreza, la violencia y la injusticia, descubran en medio de sus dificultades la presencia sanadora y salvadora de Cristo. Oremos.
  4. Por nosotros, reunidos en esta asamblea: para que la gracia del bautismo, que nos ha sido dado en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, crezca y fructifique con una adhesión cada vez más convencida y activa. Oremos.

 Mira, oh Padre, al rostro de tu Hijo y acoge la oración de esta familia tuya para que, fortalecida con el don del Espíritu, sea signo y primicia de la humanidad, partícipe del misterio uno y trino de tu amor. Por Jesucristo nuestro Señor. Amén. 

 

SOLEMNIDAD DEL CUERPO Y LA SANGRE SANTÍSIMOS DE CRISTO

Junio 2 de 2024

Entrada: Bienvenidos hermanos a este encuentro personal y comunitario con el Señor. Celebramos la solemnidad del Cuerpo y la Sangre de Cristo. Participemos con mucha fe y alegría en la renovación del misterio de nuestra redención, que se actualiza en la fracción del pan que se entrega y la sangre que se derrama para la salvación de todos.

 Lecturas: Escuchemos con atención el mensaje de la Palabra de Dios que se dirige a nosotros hoy, y como el pueblo de Israel dispongámonos a decir: “Haremos todo lo que ha dicho el Señor y le obedeceremos”.

Ofrendas: Con el pan y el vino llevamos hasta el altar nuestro deseo de mejorar nuestra relación con Dios. Que lo sepamos reconocer, valorar y cuidar en la eucaristía de cada domingo.

 Comunión: Este pan que compartimos en la comunión es el cuerpo de Cristo, si estamos debidamente reconciliados, acerquémonos a recibirlo y hagámonos uno con Él.

Monición a la procesión con el Santísimo Sacramento: Como comunidad de fe adoremos a Jesús, Pan de vida. Que así como ahora pasará solemnemente por nuestra Iglesia y nuestras calles, también pase por nuestras vidas, nos transforme, sane y libere. Sintamos cercano al Dios que se hizo compañero de viaje y alimento para el camino. Participemos con piedad en esta procesión. 

ORACIÓN UNIVERSAL

Queridos hermanos: El sacramento del Cuerpo y de la Sangre del Señor es cumbre y fuente de toda la vida de la Iglesia, prenda de bendición y salvación para el mundo entero. Elevemos al Padre nuestra oración unánime, para que nazca de este gran misterio el don de nuestra unidad y de la paz. Oremos diciendo: Jesús, Pan de vida, escúchanos.

  1.  Por la santa Iglesia: para que, fortalecida con el pan de la vida, camine por el mundo anunciando con las palabras y las obras el Evangelio de la salvación. Oremos.
  2. Por los sacerdotes, ministros del altar: para que se conformen siempre al misterio que celebran para la alabanza de Dios y la edificación de su pueblo. Oremos.
  3. Por todos los que sufren, especialmente las víctimas de la violencia, de la injusticia y de las catástrofes naturales, para que puedan encontrar en la Eucaristía el alimento de vida que las fortalece en su existencia diaria. Oremos.
  4. Por cuantos se glorían del nombre cristiano: para que en la Eucaristía, signo y vinculo de unidad, recompongan la plena comunión de fe y de amor. Oremos.
  5. Por nosotros: para que, mientras partimos el pan de la vida eterna, aprendamos también a compartir el pan terreno y a socorrer a los hermanos que viven en la necesidad o en dolor. Oremos.

 Señor, que en el sacramento del Cuerpo y la Sangre de tu Hijo has puesto la fuente del Espíritu que da la vida, haz que tu Iglesia, partiendo el pan eucarístico, sea germen de la humanidad renovada y prenda de vida eterna. Por Jesucristo nuestro Señor.

 

SOLEMNIDAD DEL SAGRADO 

CORAZÓN DE  JESÚS

Junio 7 de 2024

Entrada: Celebremos con profundo gozo la solemnidad del Corazón de Jesús que nos invita a reconocer el inmenso amor de Dios que nos salva, nos libera, nos perdona y nos llama  amar de igual manera a nuestros hermanos. Unámonos también en este día en la oración por la santificación de los sacerdotes y en la fiesta nacional de acción de gracia. 

 Lecturas: El amor de Dios manifestado parcialmente en el Antiguo Testamento, se revela de manera definitiva en el Misterio Pascual de Cristo. Escuchemos con atención la Palabra de Dios que nos presenta los rasgos de ese amor llevado hasta el extremo.

 Ofrendas: Presentemos ahora al Padre nuestros dones, que significan la ofrenda de nuestra vida y unidos siempre  a Jesús que es la encarnación del amor de Dios.

 Comunión: Cristo, nuestro cordero pascual, ha sido inmolado, El permanece entre nosotros y se nos da como alimento que nos renueva y nos une a Él y a nuestros hermanos, acerquémonos a recibirle.

ORACIÓN UNIVERSAL

 Queridos hermanos: Dirijamos nuestras oraciones a Dios Padre que, en Jesucristo, su Hijo, nos ha amado hasta el extremo. Digámosle: Padre, que tanto nos amas, escúchanos. 

  1.  Por toda la Iglesia, para que con palabras y con obras siga anunciando el amor de Dios a todos los hombres. Oremos.
  2. Por los sacerdotes, para que en esta jornada mundial de oración por su santificación reciban abundantes bendiciones para vivir con fidelidad el ministerio que se les ha confiado y prolonguen así a Cristo en sus comunidades. Oremos.
  3. Por los gobernantes de nuestra nación, para que sus decisiones y proyectos la conduzcan a una verdadera paz, al desarrollo integral y a la justicia, de modo que todos podamos participar de los dones del amor de Dios. Oremos.
  4. Por todos nosotros, para que el descubrimiento y la experiencia del amor de Jesús nos impulse a responder con igual amor a Dios y a los hermanos, especialmente a los más necesitados. Oremos.

 Dios, Padre santo, tu Hijo Jesús nos reveló tu inmenso amor en el momento de su sacrificio y muerte en la cruz; te pedimos que no dejes de concedernos lo que te hemos suplicado. Por el mismo Jesucristo, nuestro Señor.

 

 DECIMO DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO

Junio 9 de 2024

Entrada: Estamos reunidos en torno al altar para renovar el sacrificio redentor de Cristo y conmemorar su gloriosa resurrección. Dispongamos todo nuestro ser para participar dignamente de este sagrado misterio.

 Lecturas: Por el pecado el hombre perdió la amistad con Dios, Él nos promete la redención  que se cumple en la persona de Cristo Jesús que venció a la muerte resucitando y que por la fe sabemos que Dios nos resucitará con Él en el día final. Escuchemos con atención.

 Ofrendas: Al presentar el pan y el vino, hagamos patente nuestros deseos de superar las tentaciones y de hacer la voluntad del Padre.

 Comunión: Jesús que recibimos en la comunión nos da la fuerza para poder vencer nuestras malas inclinaciones. Que nos ayude a abrirnos más y más a su presencia salvadora.

 ORACIÓN UNIVERSAL

Queridos hermanos: Dirijamos nuestra oración a Dios Padre misericordioso, con aquella confianza filial que el Espíritu de Cristo ha infundido en nuestros corazones. Unámonos diciendo: Escucha, Señor, nuestra oración.

 1.    Por el santo Padre, el Papa Francisco, para que Dios, que lo eligió como pastor de la Iglesia universal, le conceda sabiduría y fortaleza en la misión de gobernar el pueblo santo de Dios. Roguemos al Señor.

Por nuestra patria y por sus gobernantes, para que Dios les inspire pensamientos y decisiones encaminados a una paz verdadera. Roguemos al Señor

3.    Por los que están en camino de conversión, por los que se preparan para recibir el Bautismo o preparan el Bautismo de sus hijos: para que Dios les abra las puertas de su misericordia e introduzca a los nuevos hijos de la Iglesia en la vida nueva de Cristo Jesús. Roguemos al Señor

 4.    Por nuestros familiares y amigos enfermos, para que Dios escuche sus súplicas, realice sus deseos y haga que, en su tribulación experimenten el gozo de la misericordia divina. Roguemos al Señor

 Padre santo, escucha nuestras oraciones y sostennos con la armadura de la fe, para que en la lucha cotidiana contra el Maligno participemos de la victoria pascual de Cristo, que vive y reina por los siglos de los siglos

  

UNDÉCIMO DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO

Junio  16 de 2024

 Entrada: Agradecidos con el Señor por la nueva semana que nos permite iniciar y por el gozo de concedernos el gozo de reunirnos como hermanos para participar en la Eucaristía, dejemos que la semilla del Reino de Dios se siembre en nosotros, crezca y produzca frutos abundantes. Vivamos con fe y devoción esta celebración. 

 Lecturas: La semilla de la Palabra sigue llegando al corazón de todos; estamos invitados a ser tierra fértil que la acoge, la deja crecer y producir frutos de salvación. Escuchémosla con atención. 

 Ofrendas: Con el pan y el vino llevamos hasta el altar nuestro deseo de mejorar nuestra relación con Dios. Que lo sepamos reconocer, valorar y cuidar en la eucaristía de cada domingo.

 Comunión: Este pan que compartimos en la comunión es el cuerpo de Cristo, si estamos debidamente reconciliados, acerquémonos a recibirlo y hagámonos uno con Él.

 ORACIÓN UNIVERSAL

 Queridos hermanos: Unidos al Señor Jesús, presentemos con sencillez y humildad nuestra oración confiada al Padre, sabiendo que siempre nos escucha. Digamos: Dios de amor, escúchanos.

  1.  Por la Iglesia universal y sus ministros: para que siembren en todo lugar un mensaje de fe y esperanza, roguemos al Señor. 
  2. Por nuestros gobernantes y por quienes aspiran a ser dirigentes de nuestras comunidades: para que siempre luchen por los valores del Reino de Dios y su justicia, roguemos al Señor.
  3. Por los más pobres y necesitados de nuestras comunidades, en particular los que han sido víctimas de los desastres naturales y de la injustica: para que a través de nuestra caridad experimenten la cercanía de Dios, roguemos al Señor.
  4. Por nuestra comunidad: para que ilumine a los cercanos y alejados con el testimonio de la humildad y de la sencillez, roguemos al Señor.

 Dios del amor y de la misericordia, atiende nuestra oración confiada y derrama sobre nosotros la virtud de la humildad, para saber pedir solo aquello que nos conviene. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén. 

 

 DUODECIMO DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO

Junio 23 de 2024

Entrada:  Hermanos, de nuevo es un gusto reunirnos para celebrar el Nombre del Señor. Hoy, continuamos nuestro camino de esperanza. Cristo es quien dirige nuestra barca, ¿lo hará así con nuestros sentimientos y nuestra vida? Si reconocemos que lo amamos, nuestra vida será buscar que sea de este modo. Celebremos el don de Dios en su Palabra y en la Eucaristía.

 Lecturas: Escuchemos, hermanos, el llamado de Dios. La liturgia de este Domingo nos invita a evaluarnos en el amor a Cristo, lo cual tiene la capacidad de tornarnos en criaturas nuevas, es decir, que encontramos un sentido para vivir. Atentos a esta invitación, permitamos que Cristo dirija la embarcación de nuestras existencias. Escuchemos.

 Ofrendas: En este momento se llevan al altar las ofrendas que se convertirán en el Cuerpo y la Sangre del Señor. Con ellas, por manos del sacerdote, también dejamos nuestras vidas para que sean transformadas por el amor de Cristo. Respondiendo a este amor, hagamos la ofrenda de nuestras vidas.

 Comunión: Donde habita el amor de Cristo todo se hace nuevo; por eso, Él mismo se nos ofrece mediante este pan consagrado. Que al pasar a comulgar reconozcamos que somos su obra y del mismo modo que hasta los vientos obedecieron, nuestra vida se rinda en aceptación de su Palabra. Con amor pasemos a comulgar.

 

ORACIÓN UNIVERSAL

 Queridos hermanos: nos hemos reunido en este domingo para conmemorar el misterio de nuestra redención; roguemos, por tanto, a Dios todopoderoso, para que todo el mundo se llene de bendiciones y de vida. Unámonos diciendo: Dios de amor, escúchanos.

  1.  1.    Te pedimos, Señor por nuestra Iglesia; para que, en medio de las tormentas del tiempo presente, esté siempre atenta a tu voz y orante en tu Palabra. Oremos.
  2.  Mira con bondad a nuestro pueblo, el cual, clama por que cesen las tormentas de la injusticia, la corrupción, la impunidad. Danos entrañas de misericordia ante nuestras propias miserias. Oremos.
  3. 3. Te imploramos, Dios de misericordia, que hagas nuevas todas las cosas por la fuerza el amor de Cristo y, con ellas, des fortaleza a los atribulados, pan a los hambrientos y esperanza a los enfermos. Oremos.
  4. 4.    Sigue derramando tu infinito amor sobre esta comunidad que se ha congregado en torno a tu Nombre; que por la intercesión del apóstol san Pablo, reconozcamos la grandeza de la llamada que nos invita a seguirte como criaturas nuevas. Oremos.

 Sé propició, Señor, con tu pueblo suplicante, para que reciba con prontitud lo que te pide bajo tu inspiración. Por Jesucristo nuestro Señor.

  

SOLEMNIDAD DEL NACIMIENTO DE SAN JUAN BAUTISTA

Junio 24 de 2024

 Entrada: Hoy celebramos la solemnidad del nacimiento de san Juan Bautista. Fiesta que tiene gran raigambre en nuestra cultura tolimense, en esta celebración festiva pidámosle al Señor Jesús que nos fortalezca en el cumplimiento de nuestra misión de anunciarlo y testimoniarlo en nuestra historia de cada día. Celebremos unidos en la fe.

 Lecturas: En la vocación y misión de Juan el Bautista, veamos reflejada nuestra vida de discípulos misioneros de Jesús. Escuchemos con fe y atención la Palabra de Dios.

 Ofrendas: Después de celebrar la liturgia de la Palabra, preparemos la mesa eucarística. Junto al pan y el vino presentemos al Señor los esfuerzos por producir frutos de caridad.

 Comunión: Acerquémonos a la mesa celestial a recibir el Cuerpo de Cristo que se nos da como el verdadero pan de vida.

 

ORACIÓN UNIVERSAL

 Queridos hermanos: Al contemplar en la figura de Juan el Bautista la llamada de Dios y la respuesta del hombre, presentemos con humildad nuestras súplicas al Padre en su infinita bondad. Digámosle: Padre de misericordia, escúchanos. 

  1. Padre bondadoso, te pedimos que acompañes y fortalezcas a los ministros de la Iglesia, para que a ejemplo de Juan el Bautista, sigan siendo auténticos profetas en un mundo  que necesita escuchar tu Palabra. Oremos.
  2. Padre eterno, te pedimos por los gobernantes del mundo entero, para que, comprometidos con la verdad, promuevan entre todos los hombres los caminos que conduzcan al desarrollo armonioso y justo. Oremos.
  3. Padre santo, te pedimos por los que sufren y no descubren luces de esperanza en su camino, para que, en Juan el Bautista, tengan una luz que les muestre el camino de encuentro con tu Hijo, que es vida plena y salvación para todos. Oremos.
  4. Padre amoroso, te pedimos por todos los que estamos reunidos en tu nombre, para que, como Juan el Bautista, respondamos con generosidad a nuestra vocación y seamos testigos valientes de tu Hijo. Oremos.

 Atiende, Padre misericordioso, las oraciones que con fe te hemos dirigido, y danos la tenacidad de Juan el Bautista para ser testigos creíbles del Evangelio. Por Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina por los siglos de los siglos.

SOLEMNIDAD DE SAN PEDRO Y SAN PABLO APÓSTOLES

Junio 29 de 2024

 

Entrada: Celebramos hoy la solemnidad de los santos apóstoles Pedro y Pablo. Demos gracias a Dios por el testimonio de Pedro y de Pablo, y por habernos llamado a ser miembros de su Iglesia. Encomendemos, de manera muy particular en esta santa Misa, al Papa Francisco, sucesor de Pedro, roca segura sobre la que se asienta la Iglesia, para que el Señor lo siga bendiciendo y acompañando.

 Lecturas: Las lecturas de esta solemnidad nos presentan la vida y la misión de los santos Apóstoles Pedro y Pablo, a quienes contemplamos como pilares de la Iglesia. Escuchemos con atención y pidamos la luz del Espíritu Santo para que comprendamos el mensaje que el Señor quiere depositar en nuestro corazón y tengamos la fortaleza para vivirlo. 

ORACIÓN UNIVERSAL

 Queridos hermanos: Confiados en la intercesión de los santos Apóstoles Pedro y Pablo, acudamos al Padre que nos ama y pidamos por la Iglesia y por el mundo entero. Unámonos diciendo: Padre, somos tus hijos, escúchanos.

  1.  Padre, te pedimos por la Iglesia una, santa, católica y apostólica, para que siga anunciando el Evangelio a todas las personas y en todos los ambientes. Oremos.
  2. Padre, te rogamos por el Papa Francisco, sucesor de Pedro, para que su ministerio nos confirme en la fe, en la unidad y en la caridad; y anime la vida y la tarea evangelizadora de la Iglesia. Oremos.
  3. Padre, te pedimos por nuestro obispo Orlando, por nuestros sacerdotes y por los religiosos; que todos ellos reflejen en su vida el amor que tú nos tienes. Oremos.
  4. Padre, te pedimos por nuestra comunidad parroquial; para que todos los que la conformamos asumamos con alegría la propia responsabilidad en la tarea evangelizadora, con la misma pasión y alegría del apóstol san Pablo. Oremos.

 Escucha, Padre bueno, las oraciones de tu Iglesia, que celebra el martirio de los santos Apóstoles Pedro y Pablo, y que quiere ser cada día más fiel al Evangelio anunciado por ellos. Por Jesucristo, nuestro Señor. 

  

DECIMOTERCER DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO

Junio 30 de 2024

 Entrada: Reunidos en torno al altar del Señor, dispongámonos a celebrar el misterio de nuestra salvación. De manera especial, en este domingo, renovemos nuestra fe en el amor de Dios y pidámosle que nos ayude a reconocer su presencia en nuestros hermanos más necesitados. Participemos con viva alegría de este banquete fraterno.

 Lecturas: Las realidad de la enfermedad y de la muerte nos agobian, sin embargo la fe nos ilumina el camino y nos enseña que Jesús las ha vencido. Pongamos toda nuestra confianza en el Señor y escuchemos atentos su Palabra.

 Ofrendas: Junto al pan y al vino, presentémosle al Señor nuestra vida, con todas las fatigas, dolores y preocupaciones que afectan nuestro existir.

 Comunión: Llegando al extremo de dar su vida por nosotros, Jesús nos ha enseñado lo que significa el verdadero amor. Que acercándonos frecuentemente a Él en la santa comunión logremos dejar de ser siervos y aprendamos a ser sus amigos.

 ORACIÓN UNIVERSAL

 Queridos hermanos: Habiendo escuchado la Palabra, debemos estar seguros que nuestro Padre del cielo es rico en misericordia con los que lo invocan sinceramente. Acudamos, pues a Él, diciendo: Padre bueno, escúchanos. 

  1.  Para el Papa Francisco y para los ministros consagrados pedimos Padre, que sigan anunciando tu amor con palabras y obras, y que lleven a todos los rincones de la tierra la Buena Nueva de la salvación. Oremos.
  2. Para nuestros gobernantes pedimos, Padre, la luz y la fortaleza que proceden de ti, de tal modo que trabajen por el bien común de los ciudadanos, promuevan la paz y la fraternidad entre todos, y aseguren el camino del progreso integral de nuestros pueblos. Oremos.
  3. Para los enfermos, los pobres, los que sufren, pedimos, Padre, de una manera especial, que puedan experimentar tu amor y tu acción salvífica; que sientan que tú no los abandonas. Oremos.
  4. Para nuestra comunidad parroquial pedimos, Padre, la docilidad de corazón que le permita reconoce y experimentar tu amor, de modo que podamos convertirnos en testigos de tu misericordia y vivamos la caridad efectiva con los más pobres y necesitados. Oremos.

 Acudimos a ti, Padre, llenos de amor y confianza; estamos seguros de que nos concedes lo que te pedimos con fe, por medio de Jesucristo nuestro Señor. Amén. 

  

DECIMOCUARTO DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO

Julio 7 de 2024

 Entrada: Queridos hermanos: invitados a esta fiesta de la fe, dejemos que el Señor nos renueve su llamada, como al profeta y obedientes como Jesús, asumamos nuestro compromiso de ofrecer a todos el regalo de lo que Dios nos otorga con largueza y bondad, su amor. 

 Lecturas: En las escrituras toda elección comporta una misión. Pero el elegido debe aprender a vencer la tentación de creer que es su fuerza la que resplandece, para ser cirio que se consume a impulsos del fuego divino, cuya luz y calor son los que importan. Escuchemos con atención.

 Ofrendas: Ofrezcamos a Dios  toda nuestra vida e historia, para que al descubrirlo actuante en medio de ellas, acojamos plenamente su voluntad divina. 

 Comunión: Unámonos a Cristo Eucaristía y dejémonos llenar de su amor, razón de ser de nuestra vida. 

 ORACIÓN UNIVERSAL

 Queridos hermanos: En Cristo, Dios Padre se ha revelado en nuestra vida, pidámosle nos conceda ser cada día auténticos discípulos de su Hijo y, confiados en su amor infinito, presentemos nuestra suplicas diciendo: Señor, aumenta nuestra fe 

  1. Para que la Iglesia, sus ministros ordenados, religiosos y fieles laicos continúen revelando al mundo la salvación que Dios realiza a favor de todos los hombres. Oremos.
  2. Para que los gobernantes del mundo y de Colombia, actúen siempre con la conciencia de que sus actos y decisiones se oriente siempre hacia la dignificación del hombre y la construcción de la justicia. Oremos.
  3. Para que los que sufren por causa de la enfermedad, las persecuciones, la soledad y la tristeza, descubran en medio de sus dificultades la presencia amorosa de Dios, revelado en su Hijo Jesús. Oremos.
  4. Para que nuestra comunidad cristiana entorno a este altar, viva con alegría esta fiesta de la llamada y la misión, consiente que le asiste en su obrar de caridad la fuerza misma de Dios. Oremos.
  5. Para que los fieles que peregrinamos en la Arquidiócesis de Ibagué, reconozcamos que dando es que se recibe y puedan así ser generosos en compartir lo que tienen con los demás. Oremos.

 Dios bueno y santo que te revelas al hombre como la fuente del amor perfecto, acoge nuestras oraciones y permítenos sentir siempre a nuestro lado. Por Jesucristo nuestro Señor. Amén. 

 

DECIMOQUINTO DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO

Julio 14 de 2024

 Entrada: El Señor desde siempre ha enviado a sus mensajeros para aliviar el dolor de sus hijos y liberarlos de la esclavitud del pecado. Hoy, al congregarnos entorno a la mesa de la Palabra y de la Eucaristía nos hace sus amigos y, en el mayor acto de confianza nos envía también a nosotros, para que vayamos a todas partes y anunciemos la Buena Nueva. Participemos con fe y esperanza.

 Lecturas: Dejémonos animar con las palabras del salmista que nos invita a que nos unamos al Señor en la misión de anunciar la paz a su pueblo. Que nuestra condición de profetas, con la acción de  su Santo Espíritu, nos permita entregar su mensaje sin temor, con autoridad y audacia, especialmente a aquellos que no siempre acogen con beneplácito su palabra. Escuchemos

 Ofrendas: Pongamos en el altar de Cristo todas nuestras necesidades y esperanzas, para que El mismo las convierta en signos de salvación 

 Comunión: Que al comulgar con el Cuerpo y la Sangre de Cristo, seamos capaces de asumir decididamente la vocación a la cual Dios Padre nos ha llamado.

 ORACIÓN UNIVERSAL

 Queridos hermanos: Elevemos nuestras plegarias a Dios para que nos ayude a responder con fidelidad a la misión de ser sus profetas. Respondemos: Señor, enséñanos a ser misioneros

  1.  Oremos por la Iglesia para que, fiel a la misión que le encomendaste, pueda conducir a los bautizados a un compromiso más generoso con el anuncio de la Buena Nueva. Roguemos al Señor.
  2. Oremos para que  los dirigentes de las naciones, conscientes de su papel en el mundo, fomenten acciones tendientes a la edificación de una sociedad más justa, solidaria y en paz. Roguemos al Señor.
  3. Oremos para que nuestros hermanos que sufren por causa de la enfermedad, la violencia y la injusticia, sean fortalecidos con la buena nueva del Evangelio y encuentren, en medio del dolor, un espacio para anunciar a Cristo. Roguemos al Señor.
  4. Oremos por quienes participamos en esta Celebración Eucarística para que, alimentados  con el Cuerpo y la Sangre de Cristo, acojamos con mayor entrega el compromiso de ser profetas de la Palabra de Dios en medio de nuestras propias realidades. Roguemos al Señor.

 Padre de las luces y autor de nuestra salvación, recibe nuestras plegarias, y haz que con nuestra vida de bautizados seamos testigos de tu amor. Por Cristo nuestro Señor. Amén.

  

DECIMOSEXTO DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO

Julio 21 de 2024

 Entrada: Esta asamblea se reúne una vez más para recordar en este Domingo que es el rebaño del Pastor eterno que ha entregado su vida para que tengamos vida y esperanza. Que la celebración que ahora comienza, nos permita descubrir el amor con el que Dios quiere conducir al rebaño de la Iglesia a cuantos siguen esperando una palabra de vida y de paz. Que esta fiesta dominical nos colme de paz y nos renueve en la comunión y en la esperanza 

 Lecturas: La palabra Divina que nos va a ser proclamada nos quiere recordar que Dios nunca olvida a su pueblo y que nos quiere invitar a construir una familia de hermanos que saben que nada pueden temer porque el amor de Dios la apacienta, acompaña y fortalece. Escuchemos 

 Ofrendas: Ofrezcamos a Dios el deseo sincero de vivir a plenitud el llamado que desde nuestro Bautismo,  Él mismo nos ha hecho.

 Comunión: Acerquémonos confiados y comulguemos con Cristo para que, unidos  más íntimamente a Él, podamos vivir conforme a su Palabra.

 

ORACIÓN UNIVERSAL

 Queridos hermanos: Reunidos en la fe y en la caridad, presentemos nuestras suplicas al Señor que nos ama y digamos con confianza: Escúchanos, Señor 

  1.  Dios de bondad, que nos convocas en la fe y en la unidad, acompaña con tu gracia a tu Iglesia, para que fortalecida por el celo de los pastores que le has regalado, sea fermento de amor y de esperanza para todos. Roguemos al Señor.
  2. Dios de la vida, asiste con la luz de la verdad a quienes nos gobiernan, de modo especial a quienes han sido elegidos para proponer las leyes que garantizan la paz y la concordia de los pueblos. Roguemos al Señor.
  3. Dios siempre providente y rico en misericordia, acompaña con tu protección constante a los que en tu nombre y para tu gloria están sembrando en el mundo la luz del Evangelio, para que puedan traer al rebaño de la Iglesia a todos los hombres de buena voluntad. Roguemos al Señor.
  4. Dios de paz, dirige a todos los fieles que peregrinan en la Arquidiócesis de Ibagué, para que viviendo profundamente el valor de reconocerse como un solo rebaño, lleguen un día a formar una gran familia de hermanos, unidos por la fe  y el amor. Roguemos al Señor.

 Escucha, Dios de bondad, la voz de tu pueblo, las esperanzas que tu pequeño rebaño te dirige por medio del glorioso Pastor que entrego su vida por nosotros y que contigo vive y reina por lo siglos de los siglos. Amén

 

DECIMOSÉPTIMO DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO

Julio 28 de 2024

 Entrada: Hermanos: Dios nos da el pan de la Eucaristía, el pan de la palabra, pan de amor, al celebrar este domingo su misericordia acerquémonos con confianza a la fuente de esperanza y de vida y pidámosle al Señor que, reunidos en la comunión de la fe, aprendamos a reconocerlo como alimento y esperanza para todos.

 Lecturas: La palabra Divina de hoy nos recuerda el amor providente de Dios, quien nos regala su palabra, su amor, su esperanza. Que sepamos escuchar la voz de los profetas, construir la unidad y sentir que Dios mismo nos alimenta y se nos da como aliento y esperanza para la vida

Ofrendas: Pongamos en manos de Dios nuestros deseos y necesidades más profundas, para que Él mismo las sacie con la abundancia de su amor.

Comunión: Comulguemos con Cristo, pan partido para todos los hombres y dejémonos renovar por Él.

 

ORACIÓN UNIVERSAL

Queridos hermanos: Unidos en la fe, pidamos al dueño de la vida que escuche las súplicas confiadas de su pueblo. Unámonos diciendo: Oh Señor, escucha y te piedad 

  1.  Por nuestro Santo Padre el Papa Francisco para que, con todos los pastores del mundo, sigan anunciando la vida, la esperanza y la paz, y sigan ofreciendo a la Iglesia el pan de vida que la alimenta y la fortalece. Roguemos al Señor.
  2. Por los que dirigen los destinos de los pueblos, para que trabajen con honestidad, para que busquen el legítimo progreso y trabajen por la reconciliación y la paz de modo que nunca falte al pueblo el pan de la verdad y de la esperanza. Roguemos al Señor.
  3. Por los que sufren enfermedad, abandono, rechazo y discriminación, para que encuentren en la Palabra y la Eucaristía sustento y alivio para sus penas, a fin de que manifiesten al mundo la solicitud de Dios por sus hijos. Roguemos al Señor.
  4. Por esta asamblea aquí reunida, para que a través de este sacramento admirable encontremos en Cristo el alimento espiritual y la fuente de vida para el creyente. Roguemos al Señor.

 Escucha, Dios de bondad, la voz de tu pueblo, que te dirige estas súplicas y acéptalas por Cristo nuestro Señor.  Amén.