24 April 2024
 

 

 

¿Qué es el SINE? Es una sigla que significa SISTEMA INTEGRAL DE NUEVA EVANGELIZACIÓN. Se trata de un método de pastoral que muchas diócesis de América

Latina, incluida la nuestra, han adoptado como estrategia para llegar a los files de la Iglesia, alejados o cercanos. El libro de los Hechos de los Apóstoles nos presentan la primera evangelización: a quienes se les anunció el mensaje (kerigma) y se convirtieron se les invitó a formar comunidad. A quienes formaron comunidad se les congregaba para la enseñanza (didajé) de los apóstoles y para la celebración de su fe. Y fruto de este proceso, compartían sus bienes, de modo que no faltaba nada a ninguno. Así pues, la primera evangelización tuvo estos momentos:

El único momento que se da solo por sí es el anuncio del kerigma, es decir, el primer anuncio: amor de Dios, alejamiento del hombre, invitación a un encuentro personal con Jesucristo y a la conversión. Los otros momentos se dan gradualmente pero pueden llegar a ser simultáneos.

La consigna para la Iglesia en el momento actual es la Nueva Evangelización. ¿Qué es evangelizar? Es buscar las 99 ovejas que están por fuera, es renovar el ímpetu misionero, es anunciarles a todos la Buena Nueva. La evangelización tiene 4 dimensiones inclusivas.

  1. El anuncio del kerigma.
  2. Todo el misterio de la Palabra o ministerio profético.
  3. Toda la misión de la Iglesia por la cual se anuncia, se establece y se extiende el Reino de Dios.
  4. Y finalmente, la transformación social del mundo.

La evangelización es un proceso dinámico en etapas: ir a todos, para darles todo, involucrándolos a todos y a todo el hombre. Este proceso se concretiza en un PLAN.

XI CONGRESO NACIONAL SOBRE NUEVA EVANGELIZACIÓN.  SINE.  Celebrado en Chiquinquirá (Colombia) 8 - 11 Agosto, año 2014.

Ponencias de:   Excelentísimo Señor Arzobispo, Flavio Calle Zapata, de la Arquidiócesis de Ibagué. (Colombia).  Excelentísimo Monseñor Octavio Ruiz Arenas, Arzobispo emérito de Villavicencio (Colombia).  

LA VIRGEN MARÍA, DISCÍPULA Y MISIONERA DE DIOS

Monseñor Flavio Calle Zapata

Discurso de apertura

Congreso SINE 2014, Chiquinquirá

Saludamos con amor a la Madre de Dios, Nuestra Señora del Rosario de Chiquinquirá, Reina de Colombia, que nos ha congregado en su santuario para el XI Congreso Nacional del Sistema Integral de Nueva Evangelización - SINE.

En su afanosa búsqueda por revitalizar la evangelización, Aparecida optó por mirar al cristiano desde dos grandes dimensiones, el discipulado y la misión, que encierran una clara pedagogía y sugieren caminos para la acción. El énfasis más original está en presentar estas dos realidades como inseparables y unidas en un solo lazo conductor que identifica al verdadero seguidor de Cristo. Ser discípulo conlleva el ser misionero, en una complementación que se prolonga en el tiempo, sin interrupción. El discípulo no puede ser “siervo inútil”, debe producir frutos, debe desarrollar los “talentos” como misionero que siembra el Evangelio a largo de su vida.

  1. Introducción

¿Por qué dedicar esta plática a María en un congreso sobre evangelización? Porque a través de ella y con su total cooperación, Dios Padre nos dio a su Hijo Redentor y Salvador. No podemos predicar a Cristo sin acudir a su Madre, quien le dio la humanidad “por obra del Espíritu Santo”. Cuando la evangelización se ha estancado, aparece María abriendo nuevos caminos de esperanza y fortaleciendo a sus discípulos y misioneros.

La historia de la Iglesia y la hagiografía están llenas de la intervención misionera de la Virgen. Mencionemos la ayuda al Apóstol Santiago en Zaragoza, el impulso a la evangelización desde Guadalupe (México), las manifestaciones y nombres de María en los diversos países, la acogida a la Madre de Dios en múltiples expresiones de devoción popular, la renovación del cuadro de Ntra. Señora del Rosario en este lugar que nos hospeda como peregrinos y evangelizadores. Se ha generado un gran desarrollo del Magisterio sobre la Virgen María, que tiene su punto más elevado en el capítulo octavo de la Lumen Gentium, por el Magisterio de los Papas y por los mariólogos que han hecho progresar la teología mariana con sus publicaciones.